Una caída drástica en la venta de vehículos importados usados reportan los importadores y vendedores de Chimaltenango. La causa, la pandemia del nuevo coronavirus.
Pero también padecen por los trámites engorrosos en la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) para la adquisición de placas de los vehículos.
El presidente de la Asociación de Importadores de Vehículos Usados de Chimaltenango, Víctor Bonilla, aseguró que esta actividad económica “ha sido fatal” durante la pandemia, pues cayó de forma drástica.
“Las fronteras y aeropuertos cerrados, el toque de queda y restricción de movilidad interdepartamental, nos afectó”, puntualizó.
También lamentó la falta de ayuda del Gobierno al sector, pese a ofrecimientos de préstamos bancarios a los que no hubieran podido acceder porque los requisitos son inalcanzables.
“La verdad es que el negocio se cayó porque no podemos vender un solo vehículo. No hay dinero circulando en las calles”, precisó.
Hay 200 importadores que generan más de 2,000 empleos indirectos
Bonilla comentó que en su taller tiene cuatro trabajadores, incluidos pintores, mecánicos y tapiceros. Aseveró que por cada vehículo importado se ocupan unas 20 personas.
10 kilómetros
La venta de vehículos se extiende por 10 kilómetros desde el libramiento hasta el kilómetro 60 de la Ruta Interamericana, comentó, pues Chimaltenango sobresale en la importación de vehículos. Sus clientes proceden de todo el país y de Honduras.
Unos 20 importadores renunciaron a la asociación porque quebraron”
Víctor Bonilla, presidente de la Asociación de Importadores
Trámite engorroso
El vocal de esa asociación, Geovany Martínez, comentó que también enfrentan la disposición de la SAT de hacer una cita previa que tarda hasta 30 días para tramitar las placas de los vehículos.
“Yo entiendo que por la pandemia ellos (SAT) crearon un sistema electrónico para hacer los trámites, pero no funciona para nosotros porque el portal está saturado”, lamentó.
Aseguró que esa situación atrasa los trámites y pierden oportunidades para vender vehículos. “No contratamos tramitadores porque esos trámites los podemos hacer personalmente”, dijo.
Al respecto, las autoridades de la SAT de Chimaltenango, se abstuvieron de dar declaraciones, al argumentar que se debe solicitar a la sede central de Guatemala.
El picop Toyota 22R, del modelo 83 al 94, y el Tacoma son los más vendibles
