Marcos Antil es el autor de libro autobiográfico, Migrante, en el cual narra su testimonio desde su infancia en su natal Santa Eulalia, Huehuetenango, hasta que el sueño americano lo convirtió en un empresario tecnológico.
A las 10 de la mañana el salón estaba casi abarrotado. Pero había una cola de gente que esperaba encontrar algún lugar para el encuentro. El viento ligero y fresco hacía de La Antigua Guatemala el lugar perfecto para escuchar de su viva voz que existe el sueño guatemalteco antes que el americano.
“Mi gran sueño sigue siendo que los niños y jóvenes no tengan que pasar por las penas que pasó mi generación”, dice. Que para salir adelante ninguno tenga que abandonar su tierra y despertar en tierra ajena. Concluye: Que para cumplir sus sueños nadie tenga que separarse de sus familias como le pasó a la suya.
Forzado
El testimonio prosiguió. El público escuchaba aquella historia, era 1990. Para entonces, Marcos Antil, contaba con apenas 14 años cuando se vio forzado a emigrar indocumentado solo a los Estados Unidos. El propósito era reunirse con su familia que ya había emigrado años antes. El sueño americano estaba a la vista.
Comenzar ese camino lo condujo a superar límites: adaptó una nueva cultura con su idioma e idiosincrasia para transformar su realidad y la de su familia, pero también la de su comunidad.
XumaK
En febrero del 2004 fundó la compañía Xumak (significa florecer en el idioma kanjobal), en Estados Unidos, Colombia y Guatemala. Es una empresa dedicada a desarrollos digitales para mercados de internet y arquitectura de sitios web.
Ahora forma parte de Wunderman Thompson, empresa líder en marketing y comercio electrónico que presta sus servicios en más de 25 países.
“El sueño guatemalteco no lo construyo yo, es responsabilidad de todos. Tenemos que crearlo, donde haya educación y salud de calidad, donde haya infraestructura moderna. Donde no haya corrupción e impunidad, donde las personas pueden ser en su esencia y sean el centro de cualquier acción. Ese es el sueño guatemalteco, unidos lo podemos lograr”.
marcos antil, migrante
Soñar
El público de pie se apropió de la convicción del autor y al unísono gritó: ¡Soñar es gratis, soñemos en grande! Luego vinieron las fotografías y los autógrafos en alguna página de su libro.
Organizadores
El evento estuvo organizado por la Asociación Actívate y la Asociación Nacional del Festival del Níspero (ANAFENI)
Al respecto, Ernesto Azurdia, presidente de la ANAFENI, comenta que la conferencia resulta interesante porque se conoce las facetas de la vida de un migrante destacado. “Nos deja una enseñanza atinada, pues tenemos que valorarnos y conocer nuestras capacidades. En San Juan del Obispo estamos creando emprendimientos para fortalecer la economía local”, puntualiza.
Por su parte, Reina Sucely Sil, originaria de Santa María Cauqué, Sumpango, Sacatepéquez, dice que la conferencia fue motivadora. Debe aprender para emprender y desarrollar su sueño guatemalteco, concluye.
